¿Qué tipo de lámparas usar para cada lugar?
Poco a poco, y a un ritmo cada vez más acelerado en los últimos años, el tema de la iluminación dejó de ser considerado como algo secundario para pasar a ocupar un rol decisivo en la ambientación de cualquier lugar, ya sea privado o público, como podrían serlo nuestro hogar o el interior de un local comercial, por ejemplo. Cada espacio tiene sus propios requerimientos y necesidades lumínicas. Para iluminar nuestro hogar, por ejemplo, podemos emplear lámparas con tecnología led, mucho más duraderas que las tradicionales y que además nos permite ahorrar mucho en energía eléctrica.
Algunas de las mejores opciones disponibles en el mercado son las lámparas AR111, de muy bajo consumo y una vida útil realmente increíble en comparación con otras más tradicionales, que además no levantan temperatura y brindan una potencia lumínica uniforme, lo cual logra un efecto de iluminación natural muy agradable que no fatiga la vista. Por otro lado tenemos las lámparas Bulbo Led, algunas de uso únicamente industrial, confiables y de buena duración, y otras de uso doméstico, que lentamente han ganado muchísimo terreno ya que se adaptan a distintas entradas de voltaje, entre 110V y 220V, volviéndolas aptas para cubrir una amplia gama de necesidades, incluida una garantía en casos de mal funcionamiento. Finalmente están las lámparas dicroicas, muy seguras y con una enorme diversidad de estilos para prácticamente todos los usos imaginables: confiables, resistentes y con un tipo de iluminación que se ajusta a todos los ambientes, sobre todo comerciales.
La enorme oferta de productos nos permite utilizar un tipo de lámpara específico para cada lugar: Bipin led, tubos fluorescentes, spots con tecnología led, lámparas de techo y pie; y todo eso teniendo en cuenta sus líneas de diseño, por ejemplo, adecuándose a las necesidades de iluminación de un local comercial; o bien aprovechando las limitaciones de espacio y o los estilos propios del mismo. Sin dudas no queremos la misma intensidad y perfil lumínico para nuestro dormitorio que para el comedor o cualquier otro lugar de la casa.
Por todas estas razones, la gran mayoría de las lámparas que se encuentran disponibles en el mercado poseen sus propias líneas de diseño, entendiendo que este es un elemento clave para darle armonía a un lugar determinado. Una buena iluminación puede cambiar por completo el espacio, haciéndolo más amplio o estrecho, según los objetivos que estemos buscando; pero también puede lograr volver cálidos ambientes naturalmente fríos o impersonales. Quizás por eso los diseñadores de interiores cada vez se muestran más abiertos al uso de lámparas específicas para cada sitio, lo mismo que los diseñadores encargados de darle forma a un comercio o vidriera, siempre considerando que la iluminación más adecuada es un rasgo que puede darle un estilo propio y un perfil de elegancia al local.
Desde luego, en nuestro hogar también podemos aplicar algunos de estos consejos. Nadie quiere el mismo tipo de iluminación para todos sus ambientes. Hay rincones de la casa en los que conviene tener lámparas de corte más íntimo y cálido, como el dormitorio, y otros donde la iluminación debe ser correcta para no perjudicar la visión, por ejemplo, en el escritorio de nuestros hijos. Incluso podemos pensar en un tipo específico de iluminación para cada momento del día, por ejemplo, lámparas de intensidad graduable para iluminar el ambiente mientras vemos televisión, firmes y seguras en la cocina, o de mayor potencia y amplitud para alumbrar espacios abiertos como jardines y zonas parquizadas.
En resumen: hay un tipo de lámpara para cada lugar, teniendo en cuenta sus diversos usos y diseños. De esta manera forme es posible obtener un tipo de iluminación armónica y con tecnología de alta gama.